El fútbol de élite enfrenta un incremento notable en las lesiones de los jugadores, problema que obliga a un análisis desde el punto de vista Medico Deportivo y áreas de las ciencias del deporte.
Este fenómeno se relaciona directamente con la creciente carga de trabajo a la que son sometidos los futbolistas con calendarios sobrecargados que incluyen numerosas competiciones en corto tiempo, lo que limita la capacidad de recuperación.
Cuando el deportista es sometido a cargas de trabajo intensas de ejercicio, bien sea por entrenamiento o competencias con periodos de recuperación cortos, estos pueden experimentar un decremento en su rendimiento físico, baja de juego y alterar algunas funciones fisiológicas que pueden manifestarse por semanas o meses, entendiendo este fenómeno como sobrecarga o sobre entrenamiento. No solo las alteraciones son físicas o fisiológicas en el sobre entrenamiento, también pueden relacionarse con algunas del orden psicológico. Por lo tanto, esta condición de fatiga acumulada y la falta de descansos adecuados entre partidos lleva a los jugadores entre otras situaciones a un punto crítico de riesgo de poder sufrir lesiones.
El periódico LOS ANGELES TIMES, en una publicación reciente, reportó un aumento en el número de lesiones en el futbol europeo masculino, se registraron 2,123 lesiones en las primeras divisiones de Inglaterra España, Alemania, Italia y Francia durante la campaña 2023-2024.
Este aumento en las lesiones es una consecuencia directa del sobreesfuerzo físico de los futbolistas, quienes se ven obligados a rendir al máximo en cada juego con una gran presión competitiva, en combinación con un calendario apretado, sin contar con los períodos de recuperación necesarios para reparar el daño muscular generado de la exigencia física.
Estrategias de Prevención
La clave para reducir el número de lesiones radica en la planificación cuidadosa de la carga de trabajo de los jugadores. Se sugiere implementar calendarios más flexibles que permitan un equilibrio adecuado entre competición y descanso. Los entrenadores y equipos médicos deben priorizar la recuperación de los jugadores mediante el uso de técnicas avanzadas como la fisioterapia, el entrenamiento personalizado y el monitoreo continuo del estado físico.
La tecnología, como los dispositivos de seguimiento de rendimiento, puede ayudar a identificar los momentos en que los jugadores están en mayor riesgo de sufrir lesiones. Al ajustar los entrenamientos y darles el tiempo suficiente para descansar, los futbolistas pueden rendir al máximo sin poner en riesgo su salud a largo plazo.
Con estas medidas, es posible minimizar el impacto de las lesiones y mejorar la longevidad y el rendimiento de los jugadores de fútbol profesional.
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